sábado, julio 10, 2004

Me siento solo

En un rincon... al lado de una carreta un oso de felpa lloraba.

No se como, pero lloraba. Amargamente y pensando en lo mucho que queria salir de ahi. Pensaba en las estupideces del mundo y no podia cerrar el llanto, tan quedito que derramaba una lagrima con cada respiro y respiraba muy despacio. Despacito en un rincon, tratando de que no lo encontraran, de desaparecer, de hacer chiquito y pequeño para que nadie pudiera tocarle. De repente habia sentido que cualquier cosa podria dañarle. Muchas veces habia costurado heridas y el mismo se las habia infringido para curarlas y ahora tan solo podia llorar. Lloraba quedito para no despertar a Par de Ojos que ahora dormia tranquilamente, pesadamente, cansinamente tapada tan solo con un saco vacio que habia encontrado en el estercolero.

De repente se sintio en un embudo y se dio cuenta viendo a las niñas que pasaban por el circo que no era correcto asi como existia, que el Oso de Felpa no daba la vida por las niñas, que las niñas abrazaban cariñosamente al Oso de Felpa, que dormian con el, que le ponian lazos en las orejas y le contaban cuentos por las noches... y el de repente sentia mucho frio. Tenia la extraña necesidad de saber "que seria si...".

De repente se sentia tan solo... de repente queria escuchar a alguien... de repente queria sentirse abrazado fuerte, fuerte, fuerte... de esos enormes abrazos que te quitan el aliento y que te devuelven el alma al cuerpo, que retienen tantas cosas en tan poco tiempo. De esos abrazos de los que te quejas despues porque de tan fuertes dejan dolores, pero son dolores que marcan y que luego de un tiempo extrañas...

De repente Oso de Felpa se vio llorando quedito en el rincon de la carreta, queriendo que Par de Ojos fuera mas fuerte, que le acunara y arrullara... que le durmiera quedito y espantara los Terrores Nocturnos.

Pero los Terrores Nocturnos no se fueron, y Par de Ojos estaba dormida.